Nereida Calero plantea alternativas para el aprovechamiento de las taras y picas de productos del sector primario
La diputada del Grupo Nacionalista Canario (CC-PNC), Nereida Calero, planteó hoy al consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, “la necesidad de “buscar sinergías con cooperativas del sector, instituciones locales e Industria e incluso promoción de pymes, para el aprovechamiento de nuestra producción primaria, pensando sobre todo en los excedentes y taras, pero también para aportar mayor valor añadido al trabajo de nuestros agricultores”.
Nereida Calero expuso en Comisión informativa que las denominadas ‘picas’ son procedimientos reglados que los productores ponen en marcha para eliminar sobreproducción en momentos en el que el mercado no puede acogerla. “Sabemos que un porcentaje se destina a bancos de alimentos y que, en teoría, el resto se debe tratar a través de gestores autorizados para aprovecharlo como alimento de ganado, producción energética, abonos, etc”.
Asimismo consideró que hay que apoyar iniciativas “para su aprovechamiento, me refiero por ejemplo a plantas de elaboración de harinas o mermeladas, o de procesamiento de pulpa de frutos, e incluso de deshidratación, o de elaboración de tejidos y fibras vegetales”. Porque “por encima de las cuestiones económicas, resulta hasta doloroso ver importantes cantidades de plátanos o tomates arrojadas en vertederos de forma irregular, mientras encontramos en el supermercado tomate deshidratado turco, o plátano frito sudamericano’”.
Narvay Quintero señaló que ya hay líneas de trabajo en este sentido, como el empleo de excedente de cosechas de plátanos en la elaboración de harinas para celíacos, elaboración de alimentos para el ganado, producción de compost agrícola e incluso estudios para la producción de pulpa de frutas para su empleo en la elaboración de zumos, yogures, etc. No obstante, también advirtió que la industria de derivados lo que exige es una garantía permanente de un abastecimiento mínimo de producción y en lo que llevamos de 2017 aún no se han producido las denominadas ‘retiradas’ de productos, que la UE permite hasta en un 5% de la cuantía total.
