CC-PNC-AHI gana la votación que permite que el SEPE no se considere como segundo pagador y que 30.000 familias no tengan que pagar a Hacienda

- Rosa Dávila: “El Gobierno de Canarias se queda solo defendiendo lo indefendible, incrementar los ingresos del IRPF a costa de la renta de las personas que peor lo han pasado en 2020”
El Grupo Nacionalista Canario ha logrado hoy, con el voto en contra de los grupos del Gobierno, el apoyo del Parlamento a la Proposición No de Ley, defendida por Rosa Dávila, por la que propone articular los mecanismos legales necesarios que permitan que no se considere al SEPE como segundo pagador a la hora de realizar la declaración de la renta por parte de 30.000 familias canarias.
“El Gobierno se ha quedado solo, perdiendo por primera vez una votación en la cámara autonómica, defendiendo lo indefendible, por no plantarse ante el Estado y exigir que todas aquellas familias que han visto mermados sus ingresos por perdida de empleo o por ERTE, se vean obligados a pagar a Hacienda”, resaltó Dávila.
Además de injusta, “resulta absurda y discriminatoria esta actitud porque incrementa la situación de precariedad y abandono de quienes peor lo han pasado durante el 2020”.
En una situación como la actual es vergonzoso que el Gobierno de Canarias siga siendo pasivo ante el Gobierno del Estado “y no haya solicitado ni los medios ni los recursos para que todos aquellos que puedan ver afectada su declaración de la renta por este hecho no tengan que hacer uso de ahorros que cada vez se disminuyen más o que ya ni siquiera tienen”:
Desde el Grupo Nacionalista Canario, “hemos pedido a los grupos de gobierno de este parlamento que tengan empatía con las miles de familia que lo están pasando mal, para que no lo pasen peor, pero en el voto en contra se han quedado retratado”.
Por ello, “lo que pretendemos es buscar soluciones a una situación que ya advertimos desde el mes de julio del pasado año, e intentamos solucionar presentando una iniciativa a los Presupuestos Generales del Estado” que fue rechaza porque “mermaba la renta del Estado, mientras eran las familias las que perdían su renta y sus recursos”, concluyó Dávila.